miércoles, 25 de mayo de 2011

Vida cotidiana y continua

Saúl comenzó un día normal en su vida. Se levantó y como era de costumbre, de muy mal humor. Vivía con su novia Selena que siempre le calma por las mañanas, puesto que ella era una chica calmada. Se fueron a desayunar con rapideza, porque calmar a Saúl era difícil para su novia Selena. Igualmente, llegaban tarde todas las mañanas a la universidad, hasta cuando Saúl no se despertaba de tan mal humor, porque Selena muy coqueta y le gustaba arreglase mucho.

Fueron en coche a recoger a unos amigos para acercales a la universidad. Siempre se quedaban Saúl y Selena esperando bastante rato dentro del coche, porque su amigo al que recogían, Leo, era muy somnoliento. Cuando al fín entraba al coche, entraba con cara de triste. Era muy depresivo y contagiaba su forma de ser. Saúl y Selena, como buenos compañeros le contaban chistes para que se animara un poco. Al final, siempre conseguían que se despertara un poco y se animara. Había unos 20 minutos de distancia desde la casa de Leo hasta la de Sandra. Cuando llegaban a su casa, Sandra siempre estaba esperando y nunca perdia la esperanza de que fueran a recogerla. Cuando ella entraba en el coche intentaba acercarse a Saúl, pues to que era una chica bastante amorosa y le gustaba estar rodeada de gente.

Siempre que llegaban a la universidad se tenian que separar, porque cada uno tenía una asignatura diferente. Era muy duro para Saúl y Selena separarse, pero gracias a Leo y Sandra conseguían separarse en diferentes clases. A la hora de comer, quedaban para ir a la cafetería a tomarse algo rápido los cuatro juntos. Allí Sandra se ponía al lado de Saúl y Selena se enojaba un poco, pero gracias a su forma de ser, calmada y serena, conseguía soportar los celos que Sandra le daba. Leo no se enteraba de la mitad de las cosas que pasaban mientras comía, porque las clases le hacían quedarse durmiendo en ocasiones. Después de que acabaran todos de comer, cada uno seguía su camino de clases. Al finalizar las clases, Sandra era la primera que acababa y como es tan esperanzada y valiente, no le importaba quedarse una hora con su música esperando a Leo. Cuando él llegaba, Sandra le contaba chistes y le animaba porque parecía que se fuera durmiendo por todas las esquinas. Se quedaban juntos esperando a Saúl y Selena unos 5 minutos. Cuando ellos llegaban, se subían al coche y cada uno iba a su casa.

4 comentarios:

  1. María, que sepas que ya he sabido que era tuyo nada más ver la primera frase... Saúl... jajaja bueno me ha gustado es como la vida de universidad de las series :) (L)

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  2. Me gusta mucho la vida cotidiana de tus humores y es muy interesante que vayan a la universidad.

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  3. Me ha gustado mucho tu historia querida Maria :)
    Pero no pongas a Saul como malhumorado! con lo majete que es él

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  4. Me ha gustado como consiguen separarse para ir a clase.

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